La respuesta es: Sí. Esto se basa en la experiencia y observaciones en Nueva Orleans después de las dramáticas inundaciones que afectaron a grandes áreas del delta en 2006. Encontraron un mes después de la inundación, estructuras y escombros con plagas de termitas. Llegaron a la conclusión de que las termitas en búsqueda de alimento en sus túneles y en los frentes de alimentación que se inundaron no sobrevivieron. Pero muchos nidos que se encontraban en árboles y tocones fueron capaces de regenerarse y empezar a buscar alimento inmediatamente después que las aguas se calmaran.
Las inundaciones aumentan en gran medida la amenaza de termitas. De hecho, la amenaza aumentará a medida que los suelos de alrededor de las estructuras sean muy húmedos y propicios para la búsqueda de alimento de termitas. Además, los tratamientos químicos actuales existentes en las estructuras de alrededor podrían haber puestos en peligro si la zona tratada fue cubierta por una capa de tierra sin tratar, lo que permite que las termitas hagan puente sobre el tratamiento existente. En el peor de los casos, el suelo tratado podría haber sido movido por las aguas de la inundación. Recomendamos acceder a un experto en control de termitas para obtener asesoramiento sobre el estado de su protección.